Farmacia y Cosmética Social
El profesionista en Química Farmacéutica Biológica tiene una orientación poco relacionada con el servicio comunitario: no puede dar consulta, no puede prescribir y tampoco puede dar talleres específicos. El programa en Farmacia y Cosmética Social da una oportunidad al alumno de QFB de la UAM-X a tener un contacto con la población. El alumno toma una conciencia social de su papel en el buen uso de los medicamentos, como una manera de apoyar a las consultas de los médicos.
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“Cosmética Social es mostrar que el uso de cosméticos influye positivamente en las personas para su inclusión social; también la educación en higiene personal y prevención de enfermedades.”— María Luisa de Lourdes Pérez González
Las personas aprenden la importancia de empezar y terminar un tratamiento correctamente, de no quedarse a la mitad. Eso ayuda al médico a tener la oportunidad de comunicarse con un paciente al decirle cuando iniciar y cuando debe terminar. La complicación actual de los tratamientos, la resistencia a determinados medicamentos y antibióticos es porque las personas no terminan el tratamiento, desconocen su importancia. En esa comunicación, a veces no tratada con cuidado por el médico, el QFB puede ocupar un punto importante en el buen uso de los medicamentos.
Educar a los niños es una estrategia interesante; es la población más importante porque serán los adultos del futuro y porque pueden monitorear y cuidar a sus padres. Aunque los responsables de los tratamientos son los padres, los niños toman conciencia y recuerdan a sus padres los horarios, los asimilan junto con sus programas favoritos o sus horarios de la escuela. También se les enseña a los niños lo perjudicial de usar mal los medicamentos, el tema de la drogadicción, los malos hábitos, seguir consejos y tutoriales en las redes sociales que están lejos de la farmacia. Los niños crecen haciéndose responsables del buen uso de los medicamentos.
En el campo de la Cosmetología, estamos acostumbrados a pensar en torno a la vanidad, pero no es sólo eso, ayuda también a la prevención. Los cosméticos tienen que ver con la higiene personal, tanto el shampoo, como el jabón y el gel. Nos permiten eliminar bacterias y microorganismos patógenos, los cuales pueden provocar enfermedades infecciosas. Respecto a ello, el QFB tiene también un campo de acción, al enseñar a los niños y jóvenes a lavarse las manos como un método preventivo.
Enseñamos con juegos y dinámicas el concepto de higiene personal, la forma en que las bacterias pueden causar enfermedades, cómo el jabón combate a esas bacterias, y con dinámicas de refuerzos los niños comprenden lo que llamamos el “Uso Racional de los Cosméticos”: aprenden la importancia de bañarse, del uso de la pasta de dientes o de lavarse las manos, para prevenir enfermedades y para darles seguridad.
Los niños se vuelven unos pequeños inspectores de limpieza. Monitorean sus actividades y las de sus padres. En las dinámicas nos hemos enterado, por ejemplo, de padres que no se lavan las manos al preparar los alimentos y los invitamos a monitorear con toda la información que les damos. El programa se ha adaptado de acuerdo a edades, las dinámicas y los juegos cambian en función de eso, y van desde niños de jardín hasta la secundaria. Los alumnos de QFB realizan en este programa de servicio social un verdadero servicio a la comunidad, y siempre quedan satisfechos de haber logrado enviar un mensaje a la juventud, que en muchos casos no tiene acceso a esta información, ese es nuestro objetivo.